NO ABANDONES A JESUS
Juan 6:60-71
Las enseñanzas del Reino de Dios no deben ser razonadas porque nuestro entendimiento queda frustrado y esto le da una oportunidad muy grande a la “Incredulidad” y a su prima hermana llamada “Duda”, para sembrar en nosotros sus falsos argumentos. Por eso dice la Escritura que el justo por la fe vivirá, no por el razonamiento de las cosas espirituales. 1 Corintios 1:18-31
Dentro de la multitud que seguía Jesús había discípulos, muy aparte de los doce que el Señor escogió. Estos cometieron el error de razonar que Jesús es el Pan de Vida, y que debíamos comer Su sangre y beber Su sangre (v.51-59). No aceptaron el principio espiritual que el Señor les estaba revelando y mejor decidieron abandonarlo.
Hoy día pasa lo mismo con algunos cristianos (discípulos) que no aceptan algunas enseñanzas bíblicas, como los diezmos y las ofrendas, el perdón, la sumisión, el soportarse unos a otros con amor, entre otros temas. Su pensamiento es huir de la congragación que representa el cuerpo de Cristo. Las Palabras que Jesús habló son espíritu y son vida, si las recibimos con fe, eso es lo que hará en nosotros.
Los doce fueron confrontados por Jesús, y Pedro reconoció que nadie tiene Palabras de vida, nadie puede dar lo que Dios da por medio de Su único Hijo, Jesús nuestro Señor. Pero muchos de los discípulos que andaba en la multitud le dieron la espalda y dejaron de caminar con Jesús (v.66). Hoy te damos una palabra de ánimo y te decimos: No abandones a Jesús, porque Él es único que puede sostenerte y llenar tu vida de amor, seguridad y paz.
Dios sabe quiénes son los que van a creer en Él y se mantendrán hasta al final con un corazón íntegro y fiel, porque Él es omnisciente, todo lo sabe. Sabe sobre cada uno de nosotros, cuál será nuestro final, dónde pasaremos la eternidad. La decisión es nuestra, nosotros forjamos nuestro destino con nuestras decisiones diarias.
Jesús sabía de Judas, que era un diablo, es decir, influenciado por los pensamientos y argumentos que rigen al reino de las tinieblas, porque él dejo que entrara la maldad en su corazón y actuó para traicionar al Maestro. La maldad hace que traiciones a Jesús con tu conducta, palabras y acciones.
Ésta porción Bíblica nos muestra dos tipos de discípulos, los que abandonan a Jesús y los que lo traicionan. Hoy Dios nos habla a través de Su Palabra para que no seamos ninguno de los dos, sino que seamos sus Llamados, Escogidos y sus Fieles hasta el final de los tiempos. Apocalipsis 17:14, Salmo 101:6.
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