miércoles, 18 de febrero de 2009

Clase 5 - GC 2009

JESUS CAMBIA EL AGUA EN VINO
Juan 2:1-12

Aparte de la resurrección y la pesca milagrosa que Juan 21:4–11 registra, el apóstol menciona siete señales (milagros), con el propósito de revelar algo acerca de la persona de Cristo, para darle autenticidad a su mensaje y señalar hacia el Reino futuro del Mesías (Isaías 35:5, 6). La primera de estas señales se encuentra en Juan 2.

La escena de la primera señal ocurre «en Caná de Galilea» (2:1), que estaba a unos ciento veinte kilómetros de Betania, el lugar donde Jesús se reunía con sus discípulos (1:28), y a unos trece kilómetros de su pueblo natal, Nazaret. La ocasión era una fiesta judía de casamiento que podía durar entre uno y siete días, de acuerdo con los recursos del esposo. Era un momento de tremenda alegría y celebración; y Jesús, sus discípulos y su madre estaban invitados (2:1, 2).

<<>>

Aún no ha venido mi hora (v 4): Esta afirmación tiene dos significados: (1) «No es el momento para que yo actúe», lo cual se referiría al hecho de que Jesús esperaba el momento apropiado para proveer el vino necesario; (2) «No es tiempo para ser glorificado», lo cual, si bien ocurre en cierta medida después del milagro (v. 11), no encuentra su cumplimiento cabal hasta la crucifixión y la resurrección de Jesús.

¿Alguna vez ha tratado de acelerar los acontecimientos? Quizás intentó entablar una relación con demasiada precipitación, tal vez intentó llevar a cabo un proyecto antes de estar plenamente preparado para manejar la situación, o quizás trató de apresurar a Dios dando por sentado que Él contestaría su oración de cierta forma, para luego descubrir que tenía un plan diferente por completo.

Todos nos ponemos impacientes, suponemos demasiado, a veces precipitamos las cosas en exceso, pero el ejemplo de Jesús es que: «Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora» (Eclesiastés 3.1). El Señor Jesús se movía en perfecta sincronización con el Padre.

¿De qué manera puedes avanzar en conformidad con
los tiempos dispuestos por Dios en lugar de los tuyos?

Dinámica:
1. Enumera algunos de tus planes o proyectos.
2. Luego someterlas a Dios en oración, rogándole que te ayude a llevarlas a la práctica con una fuerte confianza en Él y en Su tiempo.

No hay comentarios: